El
conflicto bélico librado en la península de Corea desde junio de 1950 a julio de 1953, se
inició como una guerra entre Corea del Sur y Corea del Norte, y constituyó un
enfrentamiento derivado de la Guerra fría.
Partición de la
posguerra
Poco
antes de finalizar la
Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos y la URSS acordaron la
división de Corea por el paralelo 38 con el propósito de aceptar la rendición
de las tropas japonesas. Sin embargo, ambas potencias utilizaron su presencia
para lograr gobiernos aliados.
La
URSS suprimió a los nacionalistas moderados en el norte y apoyó a Kim II Sung,
un comunista que había dirigido guerrillas anti-japonesas en Manchuria. En el
sur existía un movimiento izquierdista bien organizado, con varios grupos
nacionalistas de derechas en la oposición. Al no poder encontrar un mediador
apropiado que pudiera reconciliar ambas fuerzas, Estados Unidos terminó por
suprimir las fuerzas de izquierda, apoyando a Syngman Rhee, un nacionalista que
se había opuesto a los japoneses y había vivido en el exilio en Estados Unidos.
Todos los coreanos esperaban la unificación, pero en el marco de la Guerra
fría, las conferencias de unificación americano-soviéticas (1946, 1947)
acabaron en mutua desconfianza. En 1947 ambas potencias comenzaron a organizar
gobiernos separados. Estados Unidos convocó elecciones en 1948, con la
supervisión de las Naciones Unidas, dirigidas a la creación de la República de
Corea en agosto de 1948. En septiembre de 1948 el norte estableció la República Democrática
Popular de Corea. El 25 de junio de 1950, las fuerzas de la República Popular
cruzaron el paralelo 38, iniciando así la guerra de Corea.
La Guerra
La
Guerra de Corea -conflicto bélico
librado en la península de Corea desde junio de 1950 hasta julio de 1953- se
inició como una guerra entre Corea del Sur (República de Corea) y Corea del
Norte (República Democrática Popular de Corea) después de que esta última
invadiera los territorios de la primera.
El
conflicto rápidamente se convirtió en una guerra internacional limitada que
involucró a Estados Unidos y a otras 19 naciones. Desde un punto de vista
general, la guerra de Corea fue un enfrentamiento derivado de la Guerra fría.
Los
motivos de Corea del Norte para invadir Corea del Sur tuvieron que ver con la
frontera establecida entre ambas repúblicas en el paralelo 38, así como con las
propias circunstancias internacionales. Al contrario de lo afirmado en la
época, Corea del Norte aparentemente atacó a Corea del Sur sin conocimiento de la Unión Soviética ni
de la
República Popular China. La Unión Soviética,
que esperaba la guerra en un momento posterior, boicoteó la acción de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) cuando se produjo el ataque. El
gobierno comunista de China, mientras tanto, esperaba invadir la isla de Taiwan
sin que Estados Unidos respondiera militarmente.
La
lucha establecida al sur del paralelo 38 y la creciente oposición al presidente
de Corea del Sur, Syngman Rhee, convencieron al presidente de Corea del Norte,
Kim Il Sung, de que sería bien recibido por muchos surcoreanos como liberador y
reunificador de las dos Coreas.
La
guerra se inició el 25 de junio cuando el ejército norcoreano cruzó el paralelo
38 e invadió Corea del Sur. Estados Unidos respondió inmediatamente enviando
suministros a Corea del Sur, y pronto aumentó su implicación en el conflicto.
El 27 de junio, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, con la ausencia
voluntaria de la Unión
Soviética, aprobó una resolución presentada por Estados
Unidos que imponía sanciones militares a Corea del Norte. Tres días después, el presidente
estadounidense Harry S. Truman, ordenó que las divisiones estacionadas en Japón
se trasladaran a Corea. Las fuerzas estadounidenses, las surcoreanas y otros
contingentes de tropas de Australia, Bélgica, Luxemburgo, Canadá, Colombia,
Etiopía, Francia, Gran Bretaña, Grecia, Países Bajos, Nueva Zelanda, Filipinas,
Suráfrica, Tailandia y Turquía, con unidades médicas de Dinamarca, India y
Suecia, fueron puestas bajo un mando unificado de la ONU dirigido por el
general estadounidense Douglas MacArthur. Las fuerzas de tierra de estas
naciones, Estados Unidos y Corea del Sur se agruparon en el Octavo Ejército
estadounidense, en lo que fue la primera intervención conjunta de la ONU.
Incluso
después de que Truman involucrara a las divisiones de Estados Unidos en Corea,
la guerra siguió un curso negativo. Antes de que los norcoreanos se detuvieran
en agosto, habían tomado Seúl y las tropas estadounidenses y surcoreanas habían
sido expulsadas del pequeño perímetro alrededor de la ciudad portuaria de Pusan
situada en el sur. Los refuerzos estadounidenses pudieron mantener esta pequeña
área y el 15 de setiembre de 1950, el general MacArthur lanzó una invasión
anfibia sobre la ciudad de Inchon en la costa occidental de Corea del Sur. En
un movimiento coordinado, las fuerzas de la ONU rompieron el perímetro de
Pusan. Rápidamente los norcoreanos fueron conducidos y obligados a traspasar el paralelo
38.
Percibiendo
una oportunidad no sólo para detener la expansión comunista sino también para
eliminarla, el presidente
Truman aprobó las órdenes para que las fuerzas de la ONU cruzaran el paralelo
38 y empujaran al enemigo hacia la frontera de China. A pesar de las repetidas
advertencias chinas de que entrarían en guerra si los estadounidenses llegaban
cerca del río Yalu, las fuerzas de la ONU cruzaron a territorio norcoreano el 7
de octubre y conquistaron Pyongyang, su capital. Hacia el 25 de octubre algunas
unidades avanzadas llegaron al río Yalu; allí entraron en combate con tropas
chinas que habían entrado en Corea del Norte.
El
26 de noviembre la potente ofensiva china cerró la línea de retirada al noreste
de Corea a las tropas de la
ONU. Los comunistas reconquistaron Pyongyang el 5 de
diciembre y Seúl el 4
de enero de 1951. La ofensiva comunista se detuvo el 15 de enero a lo largo de
un frente al sur de Seúl.
El
temor a una guerra abierta con China y la Unión Soviética
hizo que el presidente
estadounidense abandonara su objetivo de reunificar por las armas Corea y
retomara su objetivo original de detener la 'agresión comunista' en Corea.
El
Octavo Ejército estadounidense inició la ofensiva el 25 de enero, y todo el
mando de Naciones Unidas participó en el potente ataque conocido como
'Operación Asesino' el 21 de febrero que provocó que los chinos se retiraran
lentamente de Corea del Sur. Seúl cayó de nuevo en poder de las fuerzas de la
ONU el 14 de marzo. Hacia el 22 de abril, éstas habían ocupado posiciones al
norte del paralelo 38 a
lo largo de una línea que se estableció hasta el final de la guerra. Mientras
tanto, el 11 de abril, el general MacArthur, que había defendido públicamente
una estrategia militar de enfrentamiento abierto con China fue relevado del
mando por Truman. Con su sucesor, el general Matthew Ridgway, durante los dos
años siguientes las fuerzas de la ONU se implicaron principalmente en acciones
defensivas.
Aunque
los comunistas no podían llevar a cabo una ofensiva importante, sus fuerzas,
bien atrincheradas, hacían que la estrategia de defensa activa de la ONU fuera
muy costosa. Algunas de las batallas más desesperadas se produjeron en las
colinas denominadas Old Baldy, Capital, Pork Chop, T-Bone y Heartbreak Ridge.
Durante
la guerra de Corea el espacio aéreo desempeñó un papel decisivo, siendo la
primera ocasión en que entraron en combate aviones supersónicos (MiG-15 chinos
y F-86 Sabres estadounidenses).
En
junio de 1951, a
medida que las operaciones bélicas se iban convirtiendo en una guerra de posiciones,
el delegado soviético en la ONU propuso formalmente que los beligerantes
iniciaran conversaciones para el alto el fuego. El 10 de julio de 1951, comenzaron
las negociaciones de tregua en Kaesong (Corea del Norte) que continuaron de
forma intermitente durante dos años.
Aunque
llevadas a cabo en un ambiente de sospecha mutua, las negociaciones finalmente
dieron como resultado un acuerdo que no resolvió un tema importante: el rechazo
comunista a aceptar el
principio, defendido por la ONU, de que un prisionero de guerra no sería
entregado a su ejército contra su deseo. Las negociaciones se rompieron en
octubre de 1952 y no se reiniciaron hasta abril de 1953. Al final de la
primavera, ambas partes acordaron que los prisioneros que no desearan regresar
a sus países fueran custodiados por una comisión neutral durante 90 días
después de la firma del armisticio. Durante este periodo, cada nación podía
intentar persuadir a sus ciudadanos para que regresaran a su país. Ambas partes
acordaron mantener una conferencia de paz de alto nivel dentro de los tres
meses siguientes a la fecha efectiva del armisticio, pero que, hasta abril de
1954, se pospuso.
En julio de 1953, se firmó el acuerdo de tregua en
Panmunjom. Así, pendiente del último acuerdo en la conferencia de paz
planificada, la guerra de Corea finalizó después de más de tres años de
conflicto y de aproximadamente cuatro millones de bajas (entre muertos y
heridos). El daño económico y social de la guerra de Corea fue incalculable.